El desempleo en el Perú ha alcanzado cifras alarmante este año, siendo la población más vulnerable y afectada la de los jóvenes entre los 18 y los 24 años. Ante esto, gobierno oficializó el Decreto Legislativo 1401, el cual regula las prácticas preprofesionales y profesionales para los jóvenes en el sector público, asignándoles beneficios similares a los que brinda el sector privado.
Este Decreto establece, entre otras cosas, que la subvención mensual de los jóvenes que ejercen prácticas preprofesionales y profesionales en el sector público debe ser de por lo menos una remuneración mínima vital (RMV), que equivale actualmente a S/ 930, con el fin de favorecer a los trabajadores jóvenes, que se han convertido en la población más afectada por el desempleo en el Perú.
Jóvenes son los más vulnerables
La reciente investigación sobre la situación actual del mercado laboral en el Perú refleja que los jóvenes, la generación Millennials, son los más afectados por el desempleo formal, esto principalmente debido por factores como regulaciones con el salario mínimo y los costos de despido.
Para algunos expertos, existe una relación negativa entre el incremento del salario mínimo y la empleabilidad de los jóvenes en el trabajo formal. Para otros, una de las razones para esta vulnerabilidad es que son trabajadores más riesgosos para las empresas por los costos de despido que generan, ya que muchos jóvenes no suelen permanecer mucho tiempo en una misma empresa.
Esto se traduce en porcentajes altos de desempleo formal en esta población. En el 2017, este porcentaje ascendió a un 12,4%, casi el cuádruple respecto al trabajador promedio, de 3,3%. Además, mientras el 53% de trabajadores de la PEA total posee un buen empleo, este porcentaje solo llega a un 37% en el caso de los trabajadores jóvenes.
Una de las razones por las cuales está sucediendo esto es por el limitado acceso a la educación superior debido a las condiciones económicas de muchas familias peruanas, por lo que muchos jóvenes se ven en la obligación de entrar en el mercado laboral informal para ayudar a sus familias y dejan de lado la preparación técnica o universitaria. En el Perú, aproximadamente 50% de los jóvenes universitarios tienen buenos empleos, pero este porcentaje solo es del 22% en el caso de quienes solo terminaron la primaria.
Trabajo informal
Como se comentó en el punto anterior, las necesidades económicas de muchas familias peruanas en situación vulnerable obligan a sus jóvenes a ingresar en el mercado laboral en cuanto salen de la escuela primaria. Y no en el mercado formal, sino en el informal. De hecho, la proporción de jóvenes que tienen un trabajo formal es de 13%, mientras el de los que participan en el mercado informal asciende a 27%.
Por lo tanto, es de vital importancia impulsar a los jóvenes de las nuevas generaciones a no abandonar los estudios y aspiren a ingresar en el mercado laboral formal. Esto no solo para que aspiren a mejores sueldos en su vida laboral, sino que además diversos estudios señalan que las primeras ocupaciones en la vida del joven marcarán en buena medida su potencial productivo futuro durante la adultez.
Fuente: elcomercio.pe.